Cuando el arte se aleja de lo político


De muchas maneras se ha intentado desligar al arte del ámbito político, se ha intentado apartar al arte del capitalismo, de la burguesía, de las masas. Sin embargo, este aislamiento no ha podido sostenerse en el tiempo y siempre ha vuelto a reinsertarse en lo político de alguna manera. Y es que el arte se encuentra ahí para transgredir y aunque el apartarse completamente de la política podría reconocerse como una manera de transgredir. También convierte al arte en impasible, en otro espacio en el que no se comenta ni se genera crítica, y poco a poco el aislamiento se convierte en una manera de aceptación.

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